Ciencia

Egipto inicia la búsqueda de la tumba de la esposa de Tutankamón

ARQUEOLOGÍA

Anjesenamón se casó con el faraón niño y, tras su muerte prematura, con Ay
Pinturas que decoran la tumba de Tutankamón en el Valle de los Reyes E. M.

La búsqueda de la tumba de Anjesenamón, la esposa de Tutankamón (1336-1327 a.C.), ha comenzado. El mediático egiptólogo Zahi Hawass lidera la expedición egipcia que tratará de localizar el lugar de su descanso eterno en el Valle de los Reyes, en la orilla occidental de Luxor, a unos 600 kilómetros al sur de El Cairo.

Según el secretario general del Consejo Supremo de Antigüedades egipcio, Mustafa al Waziri, la misión horada las proximidades del enterramiento de Ay, el faraón que sucedió a Tutankamón y con el que se esposó Anjesenamón tras la prematura muerte del "faraón niño". La zona, una sección del Valle de los Reyes, recibe popularmente el nombre del "Valle de los Monos" por la docena de simios representada en los muros de la tumba de Ay.

En sus alrededores los expertos tratan de hallar una tumba desconocida hasta ahora perteneciente a la dinastía XVIII. "Durante una excavación en el Valle de los Reyes encontramos junto al enterramiento de Ay los depósitos de fundación, una oquedad llena de objetos como cerámica, retos de comida, herramientas y otros materiales", relató el pasado verano a EL MUNDO Hawass, ex ministro egipcio de Antigüedades. "Cuando los antiguos egipcios hacían eso, sólo podía significar que se estaba construyendo una nueva tumba", agregó.

Un pariente del faraón niño

Su esperada aventura arranca tras obtener el plácet del comité permanente de las antigüedades egipcias, ha informado este viernes el ministerio de Antigüedades en un escueto comunicado. A juicio de Al Waziri, el difunto más probable de la tumba es alguien emparentado con Tutankamón. Los objetos hallados datan del reino de Amenhotep III, padre de Ajenatón -el primer faraón monoteísta de la Historia- y abuelo de Tutankamón.

?"De momento, es solo un presentimiento", advirtió en declaraciones a este diario Hawass. Una prueba de radar ha detectado ya la existencia de una anomalía situada unos cinco metros por debajo del nivel del suelo, lo que algunos señalan como la posible entrada al enterramiento. "Hasta que no lo excavemos podría ser cualquier cosa", ha reconocido el arqueólogo a la prensa local.

Precisamente, Hawass ha dirigido en el último año una misión italiana encargada de, con ayuda del radar, auscultar la árida geografía del Valle de los Reyes en busca de "cavidades no conocidas hasta la fecha".

Sin la supervisión de Hawass, el equipo de expertos italianos también ha asumido la tarea de comprobar la teoría de Nicholas Reeves que hace más de dos años sugirió la existencia de dos espacios ocultos en los muros oeste y norte de la tumba de Tutankamón. Según su tesis, una de las cavidades albergaría la cámara funeraria de la esquiva Nefertiti. De momento, sin embargo, no ha trascendido ningún detalle sobre los resultados del proyecto.

Hasta ahora, el mayor éxito de este polémico arqueólogo egipcio fue trazar el árbol genealógico de Tutankamón. "Descubrimos a través de estas técnicas que su padre era Ajenatón y que la reina Tiyi era su abuela. Fue realmente sorprendente. Jamás imaginé que el ADN podría relevar tales secretos", confesó Hawass en una entrevista a este diario.

Los resultados de la investigación -publicada a principios de 2010 junto a la constatación de que la malaria y una enfermedad ósea provocaron la muerte prematura de Tutankamón- han alentado ahora una nueva fase del proyecto. "Quiero recuperar la iniciativa. Vamos en busca de la madre de la reina Nefertiti. Sospecho que podría ser la momia hallada en la KV21. La estamos estudiando a partir de su hermana Mutbenret. También someteremos a examen a las momias de Ramsés II y sus parientes. Es el mismo equipo que ya averiguó las causas del fallecimiento de Tutankamón".