“No se vende, el agua no se vende”. El grito de batalla volvió a tronar en las calles céntricas de Comodoro este lunes, cinco horas después de que el gobernador Mariano Arcioni comunicara que decidió enviar un proyecto a la Legislatura para derogar la Ley de Zonificación Minera que fuera aprobada por mayoría el último miércoles.
Desde ese momento, también fueron cientos los residentes en esta ciudad que salieron a manifestar su oposición a la iniciativa y su defensa del agua en la provincia.
Nuevamente, la concentración se produjo en la plaza de la Escuela 83, desde donde se marchó por San Martín hasta Abásolo, doblando por Rivadavia y deteniéndose algunos minutos frente al municipio y el Concejo Deliberante, para recordarles a los gobernantes que antes de promulgar una ley de tamaña importancia se contemple su opinión, que es lo que ocurrirá ahora, según anticipó el propio Arcioni.
En enero se comenzará a trabajar en el diseño del plebiscito que permitirá conocer la opinión de todos los chubutenses sobre la iniciativa minera. Eso confirmó el gobernador esta tarde, cuando junto a cabizbajos ministros confirmó el envío del proyecto de derogación a la Legislatura, para que sea tratado este martes.
Mientras tanto, en las calles del centro de esta ciudad todo era fiesta y bullicio porque quedó demostrado que si la discusión se da en la calle y en forma pacífica, se pueden torcer destinos y voluntades.