En Uno nunca sabe hablamos con Aarón Acosta, quien luego de una descarga eléctrica casi pierde la vida a sus 18 años. Hoy vive para contarlo y en esta ocasión nos comparte cómo el #AmorPropio le ayudó a afrontar las dificultades que se le han presentado.
La historia de Aarón
Aarón vivió una etapa infantil muy normal, le gustaba jugar con los niños de su cuadra y de la escuela, hacer su tarea y pasar toda la tarde con los amigos. Una infancia feliz y siempre apoyado por sus padres. Logró adaptarse a su nueva vida; dice muy enfáticamente que a pesar de perder sus manos y pies, encontró su talento, su habilidad y se pudo responder esta difícil pregunta: ¿Para qué vivimos?
Vivimos para ser felices y para sumar algo bueno a la vida de otras personas.
¿Lo más importante en esta difícil realidad que él atravesó? Tomarse menos en serio, aceptar lo que le tocó a cada uno y, si es posible, vivirlo con humor.
Aarón también explicó que cuando uno se acepta como es e intencionalmente alimenta el sano amor propio, la vida comenzará a fluir de otra manera y encontraremos nuestro propósito.
Yo preferí ponerme zapatos y no esperar a que me alfombraran el mundo.
Aarón Acosta es licenciado en derecho por la Universidad Autónoma de Chihuahua. Actualmente es escritor y conferencista motivacional. Él lleva sus charlas a varias ciudades del país entre las que destacan CDMX, Guadalajara, Monterrey y su natal Chihuahua; presentándose continuamente en varios municipios del estado. Aarón presenta sus pláticas con una frescura y entusiasmo con sello particular; su mensaje brinda entusiasmo y sentido a la vida de quienes acuden a escucharlo, desde presentaciones en escuelas, asociaciones civiles, instituciones religiosas o grupos sociales.
La conmovedora historia de vida de Aarón la puedes encontrar en la nota completa en el canal de YouTube de CVCLAVOZ.
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.