Serofobia es un neologismo válido para aludir al miedo o rechazo hacia las personas seropositivas y específicamente a las portadoras del virus de la inmunodeficiencia humana (VIH).
En los medios de comunicación es habitual encontrarse frases como «Es claramente homófobo y serófobo», «El prejuicio serófobo no deja de ser una creencia distorsionada» o «Hay que sumar la lucha contra el estigma serofóbico».
La voz serofobia, aún no recogida en los diccionarios, está bien formada a partir de -fobia (‘aversión o rechazo’) y sero-, un elemento compositivo que significa originalmente ‘suero’, pero que ha pasado a formar voces relacionadas con las personas seropositivas (aquellas que presentan en su suero anticuerpos dirigidos contra un agente infeccioso).
Este de los elementos compositivos que amplían su significado es un fenómeno habitual en la lengua como se ve en los casos de tele (originalmente usado con el significado de ‘a distancia’ y que ahora forma palabras relacionadas específicamente con la televisión como telespectador o telerrealidad) o foto (inicialmente ‘luz’ y que ahora forma parte de voces a las que aporta el sentido de ‘relativo a la fotografía’ como fotoperiodismo o fotolibro).
Junto con serofobia, se forman serófobo, que se emplea como adjetivo («Las políticas serófobas») y como sustantivo («Es un serófobo»). Tampoco es incorrecta la variante serofóbico, aunque en este caso solo como adjetivo.
Así pues, todos los ejemplos anteriores pueden considerarse correctos.
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