Este domingo la oposición al gobierno de Gustavo Petro saldrá de nuevo a las calles, con la promesa de sacar a más gente que nunca. Es una movilización que fue convocada hace varias semanas y que ha sumado adeptos de distintos matices hasta este viernes. Los convocantes iniciales, influencers y opinadores de derecha, además de la primera plana del uribismo, le apuntan a salir de su nicho opositor y unir a sectores de centro.
La frecuencia de estas marchas y el contrapunteo con las del oficialismo las han vuelto parte del paisaje político, pero esta vez tres coyunturas le dan fuerza a la convocatoria: el llamado ambiguo del presidente a una asamblea constituyente, la intervención de dos de las EPS más grandes del país, en medio del archivo de la reforma a la salud en el Congreso, y la declaración de un día cívico el viernes para “ahuyentar convocos de la muerte”, como dijo Petro.
Tímidamente, algunos sectores políticos más allá del uribismo y de la derecha se han puesto la gorra y la camiseta para salir a marchar. El apoyo más representativo es el del exministro Alejandro Gaviria, quien hizo parte del gobierno y se ha vuelto uno de sus opositores más críticos, y el excandidato presidencial Sergio Fajardo, quien envió al cierre de la semana un mensaje encriptado sobre su posible participación.
En La Silla mapeamos los sectores que confirmaron, hasta la tarde del viernes, su deseo de salir a las calles, y conversamos con algunos de sus protagonistas.
1. Influenciadores y opinadores abrieron el telón desde las redes
Las redes sociales fueron la arena en la que cuajó la movilización de este domingo. Diferentes personalidades políticas y mediáticas, cercanas a la derecha, ambientaron la que comenzó siendo una marcha más de la oposición contra el gobierno Petro.
Dentro de los influenciadores y opinadores se han perfilado dos grupos.
El primero está conformado por una línea de activistas de derecha, cercanos al Centro Democrático, que han consolidado una discusión digital que se aviva cada vez que se aproxima la marcha. El segundo corresponde a otro grupo, de derecha y centroderecha, pero sin vínculos con organizaciones o partidos políticos.
Dentro de los nombres representativos dentro del primer grupo, con varios kilómetros recorridos en las marchas, hay nombres como Jaime Arizabaleta, Ana María Abello y Pierre Onzaga. “En un principio esto se promovió desde un nicho al cual yo pertenezco, pero poco a poco se han ido sumando personas de distintos sectores políticos”, dice el abogado y activista Arizabaleta. “Hemos intentado romper con que la marcha sea de un solo sector, todos son bienvenidos”.
Este propósito ha generado tensiones con otros sectores más políticos. Por ejemplo en Bogotá, hasta el viernes los organizadores lograron un acuerdo para no poner tarima en la Plaza de Bolívar, según supo La Silla por una fuente involucrada en la logística. Pidió no ser citada por la tensión que la decisión generó con congresistas que asistirán.
“Las afectaciones del gobierno no son para la oposición, sino para toda la ciudadanía. Por eso la reacción no viene de un sector específico, sino de la gran mayoría”, agrega Pierre Onzaga, que está marchando desde septiembre de 2022 y ha estado detrás de grandes marchas como la que se hizo contra las Farc en 2008.
Dentro de ese sector han ganado fuerza las posturas del abogado Jose Manuel Abuchaibe, quien tumbó la curul de Antanas Mockus en 2019. Abuchaibe promueve un juicio político en contra de Petro por una supuesta infracción al artículo 109 de la constitución, que habla de los topes máximos de la campaña.
A ese grupo se le sumó otro de influenciadores críticos del gobierno que han comenzado a promover la marcha de una manera más orgánica. Algunos de ellos son Diego Santos, periodista y tuitero, y Ariel Armel y Maria Clara Posada.
“Se trató de manejar de una manera más anárquica, en el buen sentido. Los que no somos de organizaciones tratamos de que los colombianos se sintieran líderes de la marcha”, dice Santos. “Lo que nos logra sentar a muchos que pensamos distinto es defender la constitución y la democracia”.
2. La primera plana del uribismo asistió luego al llamado
Si bien el uribismo ha sido protagonista en las marchas contra el gobierno, la de este domingo comenzó primero en las redes y justo por ese medio fue luego recogida por caras como María Fernanda Cabal, Paloma Valencia y Miguel Uribe.
Esta vez, por el matiz que ha alcanzado la marcha, también tomó fuerza el impulso de políticos regionales del Centro Democrático, como los representantes Hernán Cadavid y Jaime Uscategui.
Además, a esta marcha el uribismo llega con el orgullo herido. La Fiscalía llamó a juicio al expresidente Álvaro Uribe, imputado por los delitos de fraude procesal y soborno, en medio de un proceso por supuesta manipulación de testigos. Después de que la justicia negó dos veces la preclusión de su caso, será el primer expresidente del país que pasará al estrado.
Aunque aclara que no es una de las razones de la marcha, Cadavid, representante a la Cámara por Antioquia, dice que este cambio en el proceso judicial que afronta el líder de su partido también ambienta la manifestación de este fin de semana.
“No puedo decir que la situación de Uribe sea culpa de Petro, pero también cabe en la marcha. ¿Qué tuvo que pasar para que en dos ocasiones se haya solicitado la preclusión del caso y ahora haya una acusación? Hay un tufillo raro”, dice el congresista.
Además, en departamentos como Antioquia, hay nuevas figuras que hoy enarbolan la bandera opositora. Es el caso del gobernador Andrés Julián Rendón, quien ha casado de frente una pelea con el gobierno, por diferencias ideológicas y por la renuencia del presidente a financiar las vías 4G que pasan por esta región. Ese es uno de los motivos que Cadavid le suma a la marcha de este domingo.
“Las causas para marchar se han profundizado. En particular por el tratamiento del gobierno nacional contra Antioquia. No es cierto que se haya resuelto el problema de la financiación de las 4G”, dice el representante uribista.
Por su alcance en redes, el concejal de Bogotá Daniel Briceño y el representante Miguel Polo Polo también tendrán protagonismo, así como el exvicepresidente Francisco Santos, que esta semana cargó en contra de los senadores que votaron a favor de la reforma pensional con trinos que fueron calificados como desinformadores.
Pero Briceño, del Centro Democrático, anticipa que esta no es una marcha partidista. “No nos hemos reunido con el grupo que solemos activar y hemos visto más espontaneidad en la convocatoria”, dice el concejal. “Ese era el secreto para que esta marcha fuera más allá del uribismo. Por lo mismo, todavía hay incertidumbre sobre cuánta gente saldrá”.
3. Políticos y activistas se organizaron rápidamente en las ciudades
Otro de los grupos pioneros de la movilización está conformado por políticos locales del Centro Democrático y algunas plataformas integradas por organizaciones cercanas a la derecha. Tras varias marchas en los últimos años, conocen la mecánica necesaria para impulsar la movilización de este domingo en las principales ciudades.
En Medellín, el concejal Andrés Rrodríguez, del Centro Democrático, ha sido la cara visible de las marchas y también coordina la de este domingo. Dice que “sobran motivos” para marchar, pero a su lista le agrega la posible formulación de cargos por parte del CNE a Petro y a Ricardo Roa, su gerente de campaña, por supuesta financiación irregular.
“Incluso la gente que votó por él está cansada”, dice el concejal. “Petro tuvo la oportunidad de gobernar, pero solo se ha dedicado a incendiar al país. A eso le sumamos el tema de la constituyente, que nos tiene de ‘pelo parado’”.
En Cali, la excandidata al Concejo por el Centro Democrático, Alejandra Cifuentes, es otro de los rostros visibles. Desde sus redes mueve la manifestación como una de tipo “histórico”, que sumará a nuevos sectores. “Se está tratando de que la marcha se desmarque de Cambio Radical y del Centro Democrático, para que venga más gente”, afirma.
Y aunque en Barranquilla se proyecta que la movilización sea menor, Charles Chapman, un abogado y líder gremial que fue director de ProBarranquilla, se ha echado al hombro su difusión. “El mensaje que reclama el Atlántico es: mañana a trabajar y el domingo a marchar”, dice en sus redes en alusión al día cívico.
La Mesa Nacional por la Libertad, que tiene operadores en diferentes ciudades del país, es una de las plataformas que ha movido la marcha en las regiones. Rodríguez, quien es uno de sus líderes, confirma que son más de 20 organizaciones y veedurías las que moverán gente en 29 ciudades, incluyendo el exterior.
Foro Colombia Libre, una organización de veeduría que hoy lidera una firmatón en favor de un juicio político contra el presidente, también está montada en la movilización.
4. Reservistas y retirados también le madrugaron a la marcha
Los veteranos y los miembros de las reservas activas de las Fuerzas Militares han sido un sector infaltable en las movilizaciones de la oposición y esta vez no fue la excepción.
Petro llegó al poder con un discurso crítico frente al Ejército y la Policía, pasando un colador que dejó por fuera a un buen número de altos mandos en estas instituciones, y eso ha mantenido a los retirados en las calles.
Pero no solo son asistentes fieles, también han organizado sus propias manifestaciones como la de octubre del año pasado, cuando coparon buena parte de la Plaza de Bolívar en Bogotá.
Ahora vuelven a las calles, coordinados a través de la organización Foro Ampliado de Reserva Organizado (Faro) y de la plataforma Fuerza Púrpura, que agrupa a más de 60 organizaciones de exmiembros de la fuerza pública.
“Es una postura política y no partidista. No queremos que los líderes políticos tengan protagonismo. La marcha es del pueblo, de la gente, de las organizaciones que están inconformes con el gobierno”, dice Carlos Martínez, coronel retirado y coordinador de Faro.
Además del rechazo a la constituyente del presidente Petro y a las reformas, una de las principales motivaciones que tienen los exmilitares para marchar es la situación de orden público que afronta el país. “Hay un incremento de los grupos guerrilleros y narcoterroristas. No vemos una postura fuerte del gobierno en ese tema”, agrega.
En el pasado, miembros de las reservas activas han causado polémica al referirse a Petro. El expresidente de la Asociación de Oficiales Retirados (Acore), John Marulanda, habló en 2023 de “defenestrar” al presidente. Y la retórica castrense de los reservistas en las movilizaciones crispa los ánimos en sectores cercanos al gobierno.
Sin embargo, Martínez descarta un interés golpista en las marchas. “Los golpes de Estado los dan los militares. Hoy los militares en uniforme y armas son altamente respetuosos de la democracia. Eso es una forma de desinformar”, asegura.
5. Los opositores por fuera del Centro Democrático ampliaron las filas
Fueron las intervenciones de Sanitas y la Nueva EPS en menos de 24 horas, en lo que lució como una embestida del gobierno tras el archivo de la reforma a la salud en el Congreso, las que ambientaron desde la primera semana de abril la salida del resto de la oposición nuevamente a las calles.
El senador David Luna, de Cambio Radical y quien se ha convertido en una de las voces más críticas frente a Petro por fuera del uribismo, incluso dijo esta semana que el presidente “tiene la intención de quedarse en el poder” en medio de una invitación a marchar.
Y aunque el líder natural de ese partido y posible presidenciable para 2026, Germán Vargas Lleras, no dijo hasta el viernes si participaría o no de las movilizaciones, en redes ha convocó a sus seguidores a marchar con los numerales “Todos a las calles 21 A” y “Protejamos a Colombia”.
“Esta no puede ser una marcha politizada”, es lo que dice la representante a la Cámara por Bogotá, Carolina Arbelaez, también de Cambio Radical. “Este gobierno amedrenta y divide. Quieren generar crisis explícitas en todos los sectores. Por eso esta marcha es ciudadana, no de izquierda o derecha”.
Hasta el viernes en la tarde, no se había confirmado la participación de caras representativas de los partidos declarados en independencia, como el Conservador, La U y los Liberales. Sin embargo, en la marcha se espera la presencia del senador Jhonatan Pulido (Jota Pe), del Partido Verde.
Tres excandidatos presidenciales, que en la campaña de 2022 le mostraron los dientes a Petro y hoy lideran sus propios partidos, también anunciaron su participación en la marcha. Es el caso de Enrique Gómez Hurtado, de Salvación Nacional; Ingrid Betancourt, de Verde Oxígeno; y el pastor John Milton Rodríguez, de Colombia Justa Libres.
“El domingo habrá de todo. Incluso gente que votó por Petro y hoy está preocupada por la forma en que está gobernando. Saldremos unidos a decirle al presidente que también somos el pueblo; que el pueblo no es un solo sector”, dice Arbelaez.
6. El sector salud mostró su malestar tras toma de Sanitas y la Nueva EPS
Después de los reservistas y casi en paralelo a las demás caras de la oposición, la Asociación Colombiana de Cirugía se unió al llamado de marcha en la primera semana de abril. Esta asociación, liderada por el médico payanes Jorge Augusto Herrera, dijo esa semana que desde allí saldrían a marchar por lo que consideraban “el cataclismo” del sistema de salud.
La Asociación Colombiana de Sociedades Científicas, que agrupa a 69 organizaciones de médicos especialistas en el país, invitó esta semana a marchar en una nueva versión de “la marcha de las batas blancas”.
En un comunicado, publicado el miércoles, expresaron: “Ningún cambio que se quiera realizar en el Sistema de Salud, por mínimo que sea, puede afectar la salud de la población y cualquier transición debe garantizar la protección de los derechos”.
Por otro lado, la organización Pacientes Colombia, que busca defender los derechos de los usuarios del sistema de salud, también declaró su apoyo. Su vocero es Denis Silva, quien también fue opositor al anterior gobierno de Iván Duque.
En 2013 las asociaciones médicas marcharon en contra de la reforma a la salud que promovía el entonces ministro Alejandro Gaviria. Este domingo marcharán a su lado en contra de la reforma del presidente Petro.
7. Quienes se la jugaron por Petro sentaron postura tras anuncio de los médicos
“Es hora de la movilización de todo el sector salud. Muchas vidas humanas en juego”, fue la publicación que hizo el exministro de Educación de este gobierno, Alejandro Gaviria, luego del pronunciamiento de la Asociación Colombiana de Cirugía ante la decisión del gobierno de ejecutar su plan B de reforma a la salud.
Ya en días más recientes, también en redes sociales, se mostró de lleno como un promotor e inclusive tiró línea para sumar más gente a la marcha.
Gaviria es uno de los rostros que hoy lucen como arrepentidos tras su apertura frente al gobierno. El exministro aterrizó en la cartera de Educación luego de apoyar a Petro en segunda vuelta, pero sus desencuentros con el presidente por la reforma a la salud que entonces patinaba Carolina Corcho lo llevaron a salir del gobierno seis meses después.
Luego de hacerse a un lado, Gaviria escribió un libro sobre su paso por el gobierno y se convirtió en una de las voces más críticas de la gestión de Petro.
Otro que hoy luce arrepentido es Rudolf Hommes, exministro de Hacienda y exrector de la Universidad de los Andes. En 2022, dos semanas antes de la segunda vuelta, le dio el voto de confianza a Petro al verlo como “una oportunidad de cambiar el país”.
Pero en los últimos meses su postura cambió y ha señalado al presidente de tener “ambiciones totalitarias”. Dijo que saldría a marchar, pero figuras del uribismo, como el representante Hernán Cadavid, le cobraron su apoyo inicial a Pero y lo culparon de “ayudar a dañar al país”.
8. Transportadores se echaron al hombro el malestar de algunos gremios
Hasta el viernes, el único gremio montado en la marcha era Fedetranscarga, que agremia a los empresarios del transporte de carga.
“Somos el único gremio que tiene la valentía de unirse. Incentivamos a todos los transportadores a que salgan, porque las políticas de este gobierno son negativas para la economía”, dice Henry Cárdenas, presidente del gremio que confirmó su participación en la movilización a mitad de esta semana.
Esta vez los transportadores de carga también tienen una causa específica para marchar: el rechazo al aumento del precio del Acpm, que el gobierno viene aplazando desde el año pasado. Después de un aumento de casi un 50% en el precio de la gasolina, debido al déficit que generó el Fondo de Estabilización de Petro, ahora el gobierno busca quitarle los subsidios al Acpm. La Federación se opone a esa decisión.
“Levantamos la mano y decimos no al alza de combustible hasta que no haya una nueva esperanza y reinversión por los actores económicos”, dice Cárdenas. “La gente puede salir, meterse a la caravana y echar corneta para que se sienta que los transportadores estamos afectados por lo que está pasando”.
También hay que decir que las movilizaciones en cada región son financiadas por pequeños y medianos empresarios que aportan para gastos como el sonido, la tarima y la hidratación. Sin embargo, pocas veces lo hacen públicamente debido a posibles reparos por parte de clientes, aliados o del sector público.
Gremios como la Andi o Fenalco han entrado en controversia con el gobierno Petro, así como conglomerados económicos, principalmente aquellos con intereses en el sector de seguridad social. Pero hasta el viernes eran pocos los sectores empresariales que respaldaban públicamente las marchas de este domingo.
9. Parte del centro confirmó a cuentagotas que también saldrá a la calle
A medida que se sumaron sectores a la marcha de este domingo, el centro político recibió guiños que finalmente fueron bien recibidos por parte de algunas de sus figuras.
Aunque en principio solo se contaba a Alejandro Gaviria en esta lista, otros nombres confirmaron su participación al cierre de esta semana. Juan Manuel Galán, cabeza del Nuevo Liberalismo y hermano del alcalde de Bogotá, será uno de los que saldrá a marchar.
Si bien la jornada podría ser un espacio propicio para un “relanzamiento” del centro, luego de sus resultados agrios en las últimas elecciones, Galán dice que la marcha ya trascendió cualquier color político porque la gente quiere expresar su indignación.
“Al presidente se le olvida que solo ganó por el 3% de los votos y que le toca concertar y no imponer a la brava su ideología. Por encima del centro, la gente está preocupada e indignada”, afirma.
Otras caras nacionales, más inclinadas hacia la centroderecha, también se montaron a la marcha. Juan Daniel Oviedo, concejal de Bogotá, confirmó que su movimiento, “Con toda por Bogotá”, participará de la jornada porque advierten una ideologización de los problemas del país, algo que va en “contraposición con nuestros principios”.
Juan Carlos Echeverry, quien se mantiene en el debate nacional a través de sus redes y columnas, dijo que se sumará desde donde lo agarre la marcha (cuando La Silla lo consultó estaba en Chile) e insistió en que esta es una movilización que trasciende la plana uribista. También criticó el “día cívico” declarado por el presidente para este viernes.
Otras caras más locales del centro también confirmaron su participación. ProCentrismo, un tanque de pensamiento creado en 2022, que aglutina a académicos, gremios, activistas y políticos, tendrá representantes en varias ciudades.
“Tenemos un chat con 160 personas. Hay gente cercana al exviceministro Daniel Gómez, a Galán, a Eder en Cali, y a Char en Barranquilla”, dice Juan David Valderra, excandidato a la Alcaldía de Medellín y miembro de esta plataforma.
Mateo Cardona, quien apoyó a Alejandro Eder en su campaña en Cali, será otra de las voces que saldrá por ProCentrismo este domingo: “la presencia de Alejandro Gaviria y Rudolf Hommes ha generado una presión interna en los sectores de centro”, afirma.
Catalina Ortiz, excandidata del Verde a la Alcaldía de Cali y cercana a Fajardo, confirmó el viernes su participación. Y el representante a la Cámara por Antioquia, Daniel Carvalho, quien es la dupla de Humberto de la Calle en el Congreso, confirmó que también marchará desde Medellín “con un sector del centro”.
Fajardo y congresistas como Catherine Juvinao, Katherine Miranda y De la Calle, todos convocados a las marchas por parte de los sectores que las ambientaron, no dieron mayores pistas sobre su participación. El único fue Fajardo, quien con una fotografía desde un avión y una corta publicación sugirió este viernes un posible aterrizaje en la manifestación: “De México a Colombia. Domingo”, aseveró.
